- Vaya perdida de tiempo, ¿creéis que lo vais a recuperar? Ese hombre lleva muerto desde hace 5 años, ¿aún seguís con la esperanza de que despierte de su letargo?
- Menos es nada, mientras quede un resquicio de esperanza en esta vida, intentaremos aferrarnos a esa esperanza por muy difícil o complicado que sea el camino hasta la solución a nuestro problema. -dijo la mujer que estaba al lado de Anette.
Anette se limitaba a mirarme, muda, sin articular palabra alguna, con esa mirada que entraba en lo más interno de mi ser, atravesaba mis entrañas y me hacía sentir un vacío inmenso en mi interior, como si no tuviera alma.
- Haced lo que queráis -dijo el hombre de traje negro como la noche y cara pálida como la luna- si fuera por mí, ese ser que tenéis ahí encerrado... ¡Ya estaría bajo una tumba!
El hombre se marchó lentamente de la sala dejando solas a Anette y a esa extraña mujer. Más tarde la mujer de al lado se marchó por donde había venido el hombre de negro, pero Anette seguía ahí delante, fija, cómo si su vida dependiera de ello. Después de unos segundos de haberse marchado la otra mujer perdí el conocimiento...
Desperté, otra vez en la misma habitación y en la misma cama de hace ya unos 4 ó 5 días. Sí, había vuelto a tener otra vez la misma pesadilla, pero esta vez algo más completa, empiezo a pensar que lo que sueño no son pesadillas sino recuerdos de mi pasado... ¡Solo había una manera de saberlo! Debería preguntárselo a Anette.
Bajé por las escaleras y la vi asomada a una ventana con una taza de colero, mirando la nada.- Anette, tenemos que hablar.
- Claro Kirios, ¿de qué quieres que hablemos?
- Debo preguntarte ¿en qué trabajabas antes de la catástrofe que acabó con la isla?
- Pues verás Kirios, yo trabajaba de científica junto a mi madre, buscábamos la cura para esta enfermedad causada por el Clomius. Pero no todo salió como esperábamos y tuvimos que dejar la investigación.
- ¿Dónde está tu madre ahora?
- Murió, dio su vida por la investigación, ella se negaba a seguir viviendo sin una esperanza para resolver esta enfermedad y terminó por acabar con su vida, al igual que mi padre...
- Lo siento, no debería de haber preguntado, perdóname, yo no quería...
- No importa, la vida sigue, y si algo he aprendido especialmente de mis padres fue que por mucho que te golpee la vida siempre tienes que levantarte y seguir intentándolo. Bueno, ¿alguna pregunta más?
- No, gracias, aunque... ¿Hay más colero en la cocina?
- ¡Por supuesto! Sabes que siempre hago de más. -dijo con una sonrisa en la cara-
Me fui a la cocina y cogí una taza de colero, no tuve valor a preguntar el porqué del cese de su investigación, ni si yo fui sujeto de algunos de sus experimentos, aunque sé que me oculta algo importante, se le nota en los ojos cada vez que hablo del tema de mi amnesia, me mira con esa mirada que dice: "PERDONAME". Estoy muy confuso, creo que me voy a tomar el colero y voy a seguir con el libro.
Vuelvo a ver la misma escena de cuando el sueño, ¿me habría quedado dormido leyendo el libro? La cuestión es que estaba de nuevo en ese cristal y quería llegar al fondo del asunto así que intenté golpear el cristal, pero ¡no podía moverme! Estaba como paralizado, no podía ni mover los ojos, ni siquiera parpadear, me sentí impotente. Durante unos segundos estuve inmóvil intentando por todos los medios moverme, era inútil, entonces volvía escuchar la voz de aquella mujer que antes estuvo al lado de Anette. ¿Sería su madre?
- Anette, tengo malas noticias, vamos a tener que dejar la investigación. El señor Tellman me acaba de comunicar el cese de la investigación.- Pero mamá, llevamos mucho tiempo investigando y ya casi estamos a punto de descubrir la cura para la enfermedad, ¡sólo hay que esperar a que el chico despierte!.
- Cariño lo siento, pero no podemos seguir trabajando aquí. Pero tengo una idea para proseguir nuestra investigación. Tan solo tenemos que llevarnos al chico a otra parte.
- Pero mamá el señor Tellman no te dejará, intentará por todos los medios que no te lo lleves a ninguna parte y lo más seguro es que lo mate.
- Esta noche sacaremos al chico del laboratorio y nos iremos a una isla. Allí tenemos los aparatos necesarios para proseguir con la investigación, ¿vendrás conmigo?
- Vale mamá, pero prométeme que después volveremos con la cura y salvaremos a la humanidad.
- Eso está echo cariño.
En ese instante volví a perder el conocimiento. Desperté en el sofá del salón. Ya era de noche, había dormido horas, no me podía creer lo que había soñado, decidí no preguntar más a Anette, quizás los sueños me revelen mi pasado. Continuará...
Bueno espero que lo estéis pasando bien con mi historia, cada vez iré desenrollando un poco más las cuestiones que rodean a nuestros personajes, desde la muerte de la madre de Anette hasta la cura para el clomatio. Seguid leyendo mi blog si os interesa la historia y recuerdo que debajo de cada capítulo aparece un espacio para comentarios, comentad, que parece que ¡escribo para fantasmas! Sé que leeis mi blog, aparecéis en estadísticas y otros me seguís, gracias de todas formas. Un mensaje desde dentro escrito por un LOCO.











